El chico de oro sueco de Hollywood, Alexander Skarsgård, de 33 años, amontona sus éxitos uno encima del otro. Pero no siempre ha tenido la misma actitud positiva hacia la profesión de actor.
Para Los Ángeles Times habla de sus tiempos difíciles como estrella infantil y de su interrupción de la actuación a los siete años.
- Tenía mucha atención y no le gustaba en absoluto. Me hizo, tal vez no paranoico, pero muy incierto. La gente hablaba de mí en la televisión y escribían acerca de mí en los periódicos, me sentí incómodo", dice.
"Necesitaba una pausa".
Alexander nació en la profesión y sólo tenía siete años cuando debutó en "Ake y su mundo", 1984. Cuando más atención tenía, más incómodo se sentía, y finalmente dijo que lo dejaba.
- Les dije a mis padres que quería dejar de actuar y lo hice. No quería ser actor con siete años y realmente necesitaba una pausa.
Cuando tenía unos 20 años, sin embargo, tuvo el valor de comenzar a actuar de nuevo y de Estocolmo, se trasladó a Nueva York para ir a la escuela de interpretación.
- Desde el primer día, me di cuenta de lo mucho que echaba de menos, dice. Hoy en día, no tiene ningún problema con su celebridad.
- El hecho de que las personas quieran mi autógrafo o sacarme una foto es una cosa positiva y debería sentirme adulado, en lugar de hacerme sentir incómodo, he aprendido a manejarlo.
Traducido por este blog.
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